En una entrevista de trabajo no solo se pone en juego lo que es dicho a través de las palabras, también el lenguaje corporal, es visto como un mecanismo más a evaluar. Por eso es importante, que cada vez que asita a una entrevista, no solo prepare un discurso verbal, sino que también, intente expresar con su cuerpo, lo que las palabras quieren decir. Los aspectos a tener en cuenta son los siguientes.

Postura corporal: Es importante que, al estar de pie, su cuerpo este completamente erguido y derecho. Una posición “encorvada” denota inseguridad y timidez, por eso trate de mantener una visión siempre al frente, no baje su mirada, ni permanezca durante mucho tiempo observando el suelo. Es igual que cuando se está sentado, mantenga una posición derecha de su columna siempre alineada con la silla, no se escurra en la silla, esto se lee como falta de interés y despreocupación, por el contrario, es bueno que de vez en cuando usted se balancee hacia adelante, mostrando interés en algunos puntos mencionados. Siéntese que quede usted de frente con el entrevistador y procure no mover la silla donde le indican que se siente, ya que esto puede ser tomado como una actitud desafiante.

Manejo de las manos: Los movimientos de las manos permiten leer fluidez y buen desenvolvimiento, para esto, fíjese en los movimientos que hacen los conductores de televisión, que mueven sus manos con ademanes suaves y expresivos, si usted intenta ser asertivo y generar empatía, mueva sus brazos de una manera serena y natural. Por el contrario, si usted quiere ser contundente y generar mucha credibilidad haga pocos movimientos con las manos pero que sean contundentes, para esto puede valerse de los ejemplos de los conductores de noticias. Ambas posiciones las puede utilizar de la siguiente manera, cuando le estén preguntando por temas personales, tales como la vida familiar, cualidades, defectos, utilice ademanes suaves y sea empático, mientras que cuando pase a su experiencia laboral sea contundente y seguro con lo que esta argumentado, sus manos al final también son palabras.

Contacto físico apropiado: Es importante que con el entrevistador maneje un contacto físico prudente, para esto, siempre al saludar estreche la mano del entrevistar, cerciórese de no hacerlo muy fuerte, ni tampoco suave, como si tuviera miedo. Utilice la fuerza adecuada, para generar en el otro la sensación de seguridad. Por ningún motivo, sobrepase esa línea, no abrace, ni tampoco de golpecitos en la espalda, esto se puede leer como una persona que no sabe demarcar los limites en las relaciones, piense que usted apenas está conociendo al entrevistador. Al final de la entrevista, siempre estreche la mano de quien lo escucho, esto como signo de agradecimiento, y también de empatía, esta vez, de la mano, un poco más fuerte, con esto usted generara en el otro lazo.

Gestos: Es importante que module sus gestos, no bostece, no muestre signos de pereza o sueño, con su rostro y mirada demuestre interés, Mantenga siempre su visión puesta en quien lo entrevista, intente no distraerse. Si por el contrario no está a gusto con la entrevista, intente igualmente no mostrar señales en su rostro de esto, dado que usted no sabe si en algún momento tendría que volver a buscar empleo en este lugar.

Ponga su cuerpo en función de conseguir el empleo, durante la entrevista, no deje nada a la suerte, controle cada uno de sus movimientos, así tendrá más posibilidades de adquirir el empleo.

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